Dice
el diccionario:
· Agradecer: “Dar gracias por
un beneficio recibido”.
Ahí está el quid de la cuestión en el
BENEFICIO. Si al ego le viene bien, si ha obtenido beneficio entonces desde ahí
doy las gracias, y no siempre. Y si no obtiene beneficio pues no hay gracias.
Claro esa es la visión del ego, bastante limitada, dicho sea de paso, porque estima
como beneficioso solo aquello que
satisfaga sus necesidades, de cualquier tipo. Con un poco de más de anchura habría que contemplar no solo las necesidades
del ego sino las necesidades de ESO que anima, que sostiene al ego, que es el ALMA
cuya necesidad no es otra que APRENDER, no me refiero a obtener información y
sacar títulos (eso es trabajo de esferas más de superficie, “chapa y pintura”)
aprender, experimentar, conocer, ponerse en relación con la Vida y desde ahí ir desarrollando el potencial HUMANO que tod@s
traemos de fábrica. Así que cualquier experiencia, la que sea, bienvenida sea
porque es un trampolín para evolucionar. Dicho así parece fácil, pero en el día
a día vemos que la cosa se pone muy cuesta arriba porque opero, inconscientemente,
en modo ego, y éste impone sus normas y
conveniencias, lo cual trae consigo bastante SUFRIMIENTO, que viene a ser toda
esa resistencia, “ceguera” y rechazo a vivir lo que nos toca vivir.
Hay
experiencias muy agradables y otras no tanto, incluso desagradables y muy
dolorosas. Por las que también hay que pasar, atravesar y… agradecer, porque forman parte de mi
experiencia vital, aprendizaje, le guste o no le guste a mi ego.
Si me vivo desde el SER, la Totalidad que
somos, la situación es reconocida, aceptada, vivida, acogida,… y FLUIDA, puede que haya dolor pero no
sufrimiento=atasco=ego cabezón. Si las experiencias duras no me duelen,…tenemos
un problema. Creo que fue Buda quien dijo:”El dolor es inevitable, el
sufrimiento es opcional”.
Desde el SER, o por lo menos lo más
próximo a él (eso supone poner a prueba nuestra atención, consciencia,… dónde
ésta, estoy o pienso??) es vivir sin añadir drama, sin ataduras a esquemas mentales repetitivos y anquilosantes.
Es vivir permitiendo que aflore LUZ , que
ya somos, es aportar lucidez a nuestras Vidas.
Es vivir AGRADECIENDO, porque eso que me
toca vivir, puede que no lo entienda (desde el ego el PLAN DE LA VIDA le queda
grande, por eso vive en tensión constante, pretendiendo encapsular y comprimir
la realidad que es, a “su” plan, a su conveniencia,
ejerciendo un control “absoluto”,…qué
iluso!! ) decía que desde mi no entender la situación, me entrego con CONFIANZA
a vivir lo que tenga que vivir, la VIDA
SABE (la Confianza, la Sabiduría también
vienen de fábrica hasta en és@ que nos parece o directamente calificamos de
tont@,... mi ego se despacha a gusto).
Y para terminar, un toque metafórico.
Desde el ego, el agradecimiento estará siempre condicionado a si sopla viento a
favor o en contra: gracias si es a favor y gracias-NO si sopla en contra. Desde
el SER, agradecemos siempre a la Vida
que soy, que ES, que SOMOS. La VIDA SABE, me conduce, me protege, me
acompaña,….¡¡si me dejo!! (
la HUMILDAD también viene de fábrica). Gracias siempre al aire que sople como
sople,…yo voy aprendiendo a dirigir las velas en la dirección que me permita
avanzar siguiendo la corriente que la Vida me está indicando. La Vida me está
diciendo: “Saca las herramientas y remángate!!”.
¡¡Gracias Vida por esta apasionante y
estremecedora aventura que es despertar a un nuevo día!!.
OM SHANTÍ