Es un tratamiento suave y gentil, realizado con las manos para evaluar y estimular el funcionamiento del sistema cráneo-sacral en nuestro organismo. Este sistema está compuesto por: encéfalo, médula, líquido cefalorraquídeo, meninges, huesos craneales, pelvis y sacro.
El concepto craneal se basa en la existencia, detectable, de un ritmo cíclico, de expansión-contracción que tiene su origen en el Sistema Nervioso Central (encéfalo y médula espinal), éste está protegido por un líquido amortiguador (líquido cefalorraquídeo). A través de este líquido se transmite un bombeo rítmico que circula desde el cráneo hasta el sacro recorriendo la columna vertebral y, gracias a un sistema de red (sistema fascial), llega también a todo el cuerpo.
Este tratamiento puede ser aplicado a bebés, embarazadas, adultos y ancianos, con excelentes resultados.
La Terapia Cráneo-sacral está indicada en casos de:
- Dolores de cabeza y migrañas.
- Dolores de cuello y espalda.
- Problemas motores y de coordinación.
- Desórdenes del sistema nervioso central.
- Problemas ortopédicos.
- Lesiones de columna y de cabeza.
- Escoliosis, desórdenes provocados por la ortodoncia.
- Fatiga y dolor muscular, problemas del tejido conectivo.
- Síndrome de articulación temporomandibular.
- Desórdenes neurovasculares o del sistema inmunológico.
- Desórdenes causados por estrés post-traumáutico.
- Traumas post-cirugías.
- Problemas articulares y óseos.
- Lesiones articulares o musculares por deporte.
- Desórdenes infantiles: problemas de lenguaje, déficit de atención, hiperactividad.
- Problemas de aprendizaje.
- Fatiga crónica.
- Dificultad emocional, emociones suprimidas e inmovilidades físicas.
- Problemas relacionados con estrés y tensión.
- Autismo.
- Etcétera.
Mike Boxhall